El valor de la vida del hijo del protagonista de esta película es de 26000 euros exactamente

LAS CIRCUNSTANCIAS DE LA PELÍCULA Durante 1999 las fuerzas yugoslavas se habían estado enfrentando por un lado a los ejércitos de la OTAN y por otro a los grupos guerrilleros albaneses. No hace falta decir que los bombardeos y las limpiezas étnicas no habían pasado desapercibidas por la población civil. A pesar de ello el cine servio, encabezado principalmente por Emir Kosturika, describía al mundo entero un panorama muy alejado de esa realidad. "Yo he tratado de presentar un cuadro realista" –declaraba el director Srdan Golubovic en una entrevista–. "Mi película no forma parte de una corriente de cine serbio. Las películas serbias suelen ser muy divertidas y están cargadas de humor, incluso cuando no son comedias. Klopka es una película brutal y creo que el ambiente depresivo de la película corresponde a la realidad de Servia". "¿Le parece gracioso?" –le pregunta muy serio Mladen, al sonriente dependiente del banco que le está negando el crédito que podría salvar la vida de su hijo. "Lo siento′ –le contesta amablemente el dependiente– "pero si alguien ve que no sonrío mientras hablo con un cliente podrían despedirme. Es un banco extranjero y estas son las normas... un asco tío" –añade con los ojos bajos y una enorme sonrisa forzada–. ¿Cuál es el valor de una vida? Como apunta un siniestro personaje de la película, la vida no sólo tiene un precio específico en Serbia. Tras los atentados del 11 de septiembre en las Torres Gemelas el gobierno de Estados Unidos indemnizó a las familias de las victimas proporcionalmente a la remuneración que habían obtenido en sus trabajos. El valor de la vida del hijo del protagonista de esta película es de 26.000 € exactamente, que es lo que cuesta en Berlín la operación que le podría salvar la vida. Los graznidos de los cuervos presiden escenarios grises y húmedos. Los músicos de la banda que trata de animar el Hotel Moscú parecen espíritus a punto de la congelación. En medio de una sociedad corrupta los pequeños empresarios o los médicos conducen coches de hace treinta años mientras que otros gastan 30.000 € en simples marcos para cuadros. E (...) /// Pablo Fernández nos habla hoy en entrelineas.org sobre " en el artículo "Klopka: La trampa de Srdan Golubovic" ❤ ¿Te parece interesante? Para saber más puedes seguir leyendo en entrelineas.org/revista/klopka
http://dlvr.it/SC20LB

Comments

Popular posts from this blog

Robert De Niro como el mentalista ciego

Dice Chesterton que cuando el hombre deja de creer en Dios, no es que no crea ya en nada, es que cree en cualquier cosa.

Asa Carter decía que el rock tiene carácter sexual, inmoral y era el mejor camino para fusionar ambas razas