John Stott se refería a su doctrina siempre con la etiqueta de reformada pero se consideraba en primer lugar cristiano
La postura de Utley era de simpatía a "la tendencia contemporánea de la erudición bíblica que se opone al liberalismo teológico del siglo XIX, que tiene todavía sus defensores, pero está casi tan muerto como el anterior fundamentalismo". Pará él, "el Dr. Graham no era fundamentalista en el antiguo sentido de la palabra". Según el editor del Times, el evangelista estadounidense "predicaba el cristianismo como una religión sobrenatural, no como una forma de filosofía moral". En ese sentido, Utley creía que Graham tenía "el apoyo de la erudición bíblica contemporánea". Para entender la repercusión que tuvo este debate, hay que darse cuenta de la importancia que tenía el diario The Times, no sólo en la sociedad británica, sino en todo el mundo. Era el modelo de periodismo por antonomasia. Stott mismo lo leía cada mañana a la hora del desayuno, desde sus días de estudiante en Cambridge. Había otros periódicos, ¡claro! "El tío John" no era fa