Encontramos aquí a La dama de hierro como una anciana vulnerable

Una señora mayor camina encorvada y vacilante, con la cabeza rodeada de una bufanda, a la tienda del barrio para comprar un paquete de leche. Al escuchar el precio, comienza a refunfuñar, molesta por los titulares de los periódicos y la rudeza de los clientes. Vuelve arrastrándose a casa, sin que nadie en el comercio o en la calle la reconozca, a pesar de ser una de las figuras icónicas del Reino Unido en los años ochenta: Margaret Thatcher. Encontramos aquí a La dama de hierro como una anciana vulnerable que conversa con el fantasma de su marido, mientras recuerda su vida en flashbacks. Es ese tiempo presente el que te sorprende, más que su origen humilde y su papel pionero como mujer en el partido conservador. La película elude los aspectos más escabrosos de la política de Thatcher, para presentarnos a una señora decrépita que muestra ya síntomas de senilidad, mientras es vigilada por su hija, enfermeras y asistentes. QUIEN CREÍAS CONOCER Ver La dama de hierro fue una extraña experiencia emocional. Primero, por la pequeña sala donde se proyectaba en Madrid, un lugar que me trae muchos recuerdos, donde estábamos esa noche sólo yo y mi esposa. Segundo, porque fue en la época de Thatcher (1975–1990), cuando más tiempo pasé en el Reino Unido, después de haber estado allí los primeros años de mi vida. Las imágenes de las huelgas de hambre y los conflictos con los mineros, las bombas del IRA y la guerra de las Malvinas me son tan familiares como el nacimiento del punk o la boda del Príncipe Charles y Lady Di –cuando estudiaba inglés en Londres, enfrente del estudio de los Beatles en Abbey Road–. Sin duda, la grandeza de esta película no está en los fragmentos de la vida de Thatcher, sino en el retrato inmisericorde de la crueldad de una edad avanzada. Esta melancólica historia de una dependencia casi senil, nos muestra la perspectiva que da el paso de los años a personas que creías conocer, al descubrir la impotencia a la cual nos (...) /// José de Segovia nos habla hoy en entrelineas.org sobre "La dama de hierro: La vejez de La dama de hierro" ❤ ¿Te parece interesante? Para saber más puedes seguir leyendo en entrelineas.org/revista/la–dama–de–hierro

source https://www.entrelineas.org/revista/la-dama-de-hierro

Comments

Popular posts from this blog

Robert De Niro como el mentalista ciego

Dice Chesterton que cuando el hombre deja de creer en Dios, no es que no crea ya en nada, es que cree en cualquier cosa.

Asa Carter decía que el rock tiene carácter sexual, inmoral y era el mejor camino para fusionar ambas razas